La fusión improbable de la escultura y la transparencia, esa es la cualidad que consigue Marie Christophe en sus diseños. Como una gran tela de araña de alambre de estaño, un gran volumen que ocupa el espacio pero nunca lo domina.
Las
obras más reconocibles de Marie
Christophe son sus famosas lámparas
de araña de corte clásico con aplicaciones de cristal de la Colección
Montgolfiere. Lámparas totalmente hechas a mano en su Atelier de París,
donde se crean magnificas esculturas con luz. Allí esculpen con un humilde
alambre sus caprichosas lámparas y
chandeliers salpicados por elementos tan lujosos como el cristal, o tan
modestos como la cerámica.
Ligeros como el aire y tan transparentes como
burbujas en un vaso de champán, la fusión improbable de la escultura y la
transparencia. Christophe es conocida por sus colaboraciones con las principales
casas de moda y marcas de liho: Dior, Hermes, Louis Vuitton y Baccarat, así como
el musée de la Mode en París.
Marie Christophe plantea, a través de sus
siluetas,la eterna problemática de los límites en el arte decorativo y la
escultura. ¿Donde termina el arte y comienza el objeto?
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