Birdie es una
luminaria fina y estilizada como el tronco de un árbol. Posee una pantalla que
recuerda la forma clásica de la lámpara de lectura, pero reinterpretada de una
forma original. Y un sistema de encendido, diseñado como una rama, lista para
acoger a un pájaro. Tres elementos que se interrelacionan entre ellos con
espontaneidad, con el único fin de dar vida a una luminaria amistosa, con
armonía, trasversal en el toque y en las posibilidades de ambientación. Capaz
de relacionarse con estilos, elementos de mobiliario y gustos distintos y muy
diversos.
La familia Birdie, diseñada por Ludovica y Roberto Palomba para Foscarini en 2011, se amplió en el 2013 con la versión de
suspensión. Primero vinieron las versiones: Birdie de sobremesa, Birdie de pie y Birdie aplique.
A estas primeras versiones, les siguieron: Birdie plafón que surgió de la
evolución natural del proyecto inicial. Birdie
alzó el vuelo y dio vida a un sistema de luminarias de techo en las que, un
número variable de brazos, finos como las ramas de un árbol invertido,
sostienen pequeños difusores de color blanco, gris, naranja o carmesí.
Por último llegó Birdie suspensión, equipada con florón
adicional y cables regulables que permiten colocarla a la altura deseada. Seis
o nueve brazos de acero esmaltado de diversas longitudes sostienen pequeños
difusores de color blanco, gris, naranja o carmesí, que se iluminan como llamas
de un candelabro contemporáneo.
La serie Birdiese ha convertido en una de las piezas más deseadas de la firma italiana Foscarini. Tras el éxito en sus
característicos colores, a finales del 2014 llegaron dos exquisitos modelos con
estructura y base de acero lacada en cobre y cromo negro. Que Birdie sea monocromática no es algo
trivial. De hecho, la unidad de este limpio diseño de Foscarini busca
representar la continuidad entre los elementos de la naturaleza. La versión de Birdie Metal en cobre es un paseo
otoñal hacia el brillo del atardecer; resplandecerá en interiores cálidos y de
vanguardia. El modelo lacado en cromo negro es más clásico y masculino,
perfecto para espacios con una decoración contemporánea y depurada.
Birdie acompaña
la vida cotidiana con una presencia agradable en estilo. Un estilo clásico que
se retoma con el fin de volver a hacerlo parte de nuestra memoria colectiva y
de la imaginación.
&